Encontrar una plaza libre donde aparcar gratis el coche en Vilanova i la Geltrú se ha convertido en una misión casi imposible en muchos barrios de la ciudad, para desesperación de muchos vecinos. Junto a la calle Montseny, un tramo del torrente de Sant Joan incluso se ha convertido en un aparcamiento donde estacionan una treintena de vehículos, pese al riesgo que conlleva esta práctica.
Tal como podemos ver en la siguiente fotografía, en este tramo del torrente existe una señal de tráfico que indica claramente a los conductores la prohibición de aparcar en el cauce debido al peligro de riadas.
¿Cubriría el seguro los daños del coche en caso de riada?
Cabe recordar que Vilanova i la Geltrú tiene una «vulnerabilidad alta» frente a inundaciones y riadas, de modo que el riesgo de inundación irá a más durante los próximos años en las áreas próximas a los torrentes y junto a las playas. Así lo advirtió un informe oficial sobre el cambio climático en la ciudad.
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Los conductores que se arriesgan a dejar su vehículo aparcado en el cauce del torrente, a pesar de la señal de prohibición, deben saber otra cosa. En el hipotético caso de que viniera una riada y se llevase su vehículo, o entrase barro en el motor obligando a su sustitución, etc., los daños no serían cubiertos automáticamente por la compañía con la que tenga contratado el seguro de su vehículo.
«En un caso así, el propietario del vehículo debería reclamar los daños al Consorcio de Compensación de Seguros. Se trata un proceso bastante más largo en comparación con tramitar un siniestro en una compañía. Puede alargarse unos seis meses», explica Albert Pujol, responsable del departamento de Seguros en la gestoría Gestingral de Vilanova i la Geltrú.
RECORRIDO DEL TORRENTE DE SANT JOAN, EN PARALELO A LA CALLE MONTSENY
Aparcar gratis en Vilanova, cada vez más complicado
Lo cierto es que las posibilidades de encontrar una plaza donde aparcar gratis en Vilanova i la Geltrú se han ido reduciendo en los últimos años a medida que ha aumentado el parque móvil de la ciudad y se han extendido las zonas azules y carriles-bici. A ello hay que sumar la eliminación de plazas de aparcamiento junto a colegios, en zonas que pasan a ser peatonales, etc.
En la actualidad, en la capital del Garraf están registrados 29.900 turismos, además de 8.700 motocicletas y 5.400 vehículos industriales (furgonetas, camiones, etc), según cifras del Idescat.
Eliminación de plazas de aparcamiento en el barrio de la Sardana
En esta parte en concreto de la ciudad por donde discurre el torrente de Sant Joan, en el barrio de la Sardana, la situación es especialmente complicada debido a que se trata de una zona con alta densidad de población, donde existen varios bloques de viviendas. Aquí están censadas 4.009 personas en una superficie de 18 hectáreas, según datos del Ayuntamiento.
«Es un barrio humilde. No todo el mundo puede permitirse pagar una plaza de parking», dice un residente de la zona.
LOCALIZACIÓN DEL BARRIO DE LA SARDANA
Vecinos consultados por Vilanova.blog se quejan porque, según explican, no les consultaron cuando el pasado mes de noviembre el Ayuntamiento suprimió las plazas de aparcamiento en la calle Canigó (donde existe una escuela pública y una guardería) e impidió además la circulación de vehículos mediante grandes maceteros y bolardos, tal como podemos ver en la siguiente fotografía.
«Puedes entender que limiten la circulación de vehículos en la zona durante las horas de entrada y salida de los alumnos. ¿Pero cortar completamente la calle es necesario también en fines de semana y cuando llegue el verano?», expone una vecina.
«Los vecinos no contamos para nada»
Respecto a la intervención llevada a cabo por el Ayuntamiento en la calle Canigó, un vecino del barrio, Xavier Vallés, exponía lo siguiente en un artículo de opinión publicado en Eix Diari el pasado 10 de diciembre:
«Está claro que lo primero y más importante es la seguridad de los más pequeños y de sus acompañantes, lo que se ha visto agravado en los últimos tiempos por esta maldita pandemia que tanto daño nos está haciendo, por eso es evidente que algo se tenía que hacer».
«Lo que no entendemos es que las decisiones tomadas por parte de los técnicos, políticos, o vete a saber quién, no hayan sido consensuadas con nosotros, los vecinos. ¿No somos parte afectada? ¿No deberíamos tener derecho a opinar? ¿Alguien ha pensado en la gente mayor, o los vecinos con movilidad reducida y otras discapacidades, que requieren de la ayuda familiar y que deberían poder acceder con facilidad? Así pues no contamos para nada ¡Sencillamente se toma una decisión y adelante, que si callan y no dicen nada ya lo tenemos hecho!»
«No queremos bancos, ni jardineras, ni una rambla para pasear, tenemos dos plazas a menos de cien metros para poder hacerlo; no hay tiendas, bares, restaurantes, no hay ningún centro comercial, queremos la calle tal como estaba, con las actuaciones que sean necesarias para conseguir un buen entendimiento para todos».
Un cartel colgado de un balcón dice: «Pacificación Calle Canigó, Sí, pero respetando los derechos de movilidad de TODOS los colectivos: gente mayor, minusválidos, escuelas, vecinos… Basta ya autoritarismo del Ayuntamiento«.
Ayuntamiento: «Se está buscando una solución de consenso»
Desde Vilanova.blog nos hemos puesto en contacto con el Ayuntamiento para conocer la postura del gobierno municipal respecto a las quejas vecinales y si se ofrecerá alguna solución alternativa a los residentes de la zona.
«El Ayuntamiento de hecho está trabajando desde hace muchos meses con las dos comunidades de vecinos de la calle y con las comunidades educativas de la escuela y la guardería (direcciones y AFA) sobre este tema», explica una portavoz municipal.
«Se está buscando una solución de consenso, todo el mundo tiene ganas de entenderse. Lo que todo el mundo comparte es que en horarios de entrada y salida escolar no debe haber tráfico. Posiblemente en los próximos días explicaremos cómo queda la propuesta nueva de movilidad en la calle, se tienen que acabar de decidir algunos aspectos con todas las partes», añade esta misma fuente.